Jamie Foxx se enfrenta a una demanda por una supuesta agresión sexual que tuvo lugar en 2015 en un bar de la azotea de Nueva York.
La actriz alega que Foxx la llevó a una zona apartada, le tocó los pechos y la agredió por debajo de los pantalones sin su consentimiento.
El incidente ocurrió en Catch NYC, donde Foxx y el dueño del bar, Mark Birnbaum, estaban presentes.
La demanda alega que Foxx le dijo piropos a la actriz, comparándola con la belleza de Gabrielle Union, antes de agredirla en la azotea.
La mujer afirma que un guardia de seguridad estaba presente y pudo presenciar el incidente hasta que llegó un amigo y Foxx se apartó.
La víctima solicita una indemnización por dolor, sufrimiento, angustia emocional, ansiedad y humillación.
La demanda también cita a Birnbaum y a Catch NYC, alegando que permitieron la agresión.